Utilizados, entre otras aplicaciones, para regular la retroiluminación en dispositivos electrónicos de consumo, estos sensores de color con interfaz I²C pueden ser útiles también en aplicaciones industriales.
La norteamericana Vishay Intertechnology anuncia el lanzamiento de sus nuevos sensores de color para aplicaciones de alta sensibilidad y linealidad.
Los nuevos sensores RGBC-IR de Vishay han sido concebidos para su uso en aplicaciones como el balanceo automático de blancos y la corrección de color en cámaras digitales, el ajuste automático de la retroiluminación en pantallas LCD, o la monitorización activa de la salida de color LED para iluminación inteligente en la IoT.
Por el momento, esta serie se compone de dos modelos: el VEML3328 (visualización desde arriba), y el VEML3328SL (visualización lateral). La compañía fabricante ha buscado ofrecer una mejor linealidad y una sensibilidad más alta que en los dispositivos análogos de generaciones previas, así como incluir en ellos nuevas funcionalidades como es el caso de un canal infrarrojo.
Para operarlos, disponemos de una interfaz I²C compatible con SMBus y energéticamente eficiente. Para la operación, este dispositivo requiere de un rango muy bajo de voltaje, de entre 2,6 y 3,6 V, lo que permite prolongar la duración de la batería cuando va montado en sistemas portátiles.
Además, estos sensores de color con interfaz I²C de Vishay ofrecen una resolución de 16 bits y se presentan en encapsulados de perfil bajo. Sensorizan los colores rojo, verde, azul, claridad, y luz infrarroja mediante la incorporación de fotodiodos, amplificadores, y circuitos analógicos/digitales en un solo chip CMOS.
Disponen de la capacidad de calcular la temperatura del color y sensorizar la luz ambiente, ofreciendo una solución compacta para el ajuste de la luz de retroiluminación en dispositivos electrónicos de consumo como ordenadores portátiles.
Aplicaciones para los nuevos sensores de color con interfaz I²C
En principio, los sensores pueden ser útiles en aplicaciones para diferenciar los entornos de iluminación interior y exterior, asegurando que las pantallas mantienen un color verdadero consistente con el entorno y con el brillo adecuado basado en las condiciones de iluminación del entorno.
También hay lugar para su uso en aplicaciones industriales, gracias a sus características de compensación de temperatura que permite al sensor mantener una salida estable bajo temperaturas cambiantes.
Y, para finalizar la noticia, los sensores de color pueden encontrarse en los distribuidores autorizados Digi-Key Electronics y Mouser Electronics.
