Colocación de componentes y monitorización térmica
Una parte integral de la eficacia de cualquier sistema de refrigeración es cómo se pueden colocar los componentes para optimizar el flujo de aire y maximizar la distribución del calor.
Los componentes colocados sin el espacio adecuado entre ellos limitan tanto el flujo de aire como el tamaño de los disipadores de calor que se pueden utilizar.
Por lo tanto, cualquier componente crítico que genere calor debe ubicarse estratégicamente dentro de todo el sistema para facilitar un enfriamiento general eficiente.
Si bien se debe tener cuidado en la ubicación de los componentes individuales que generan calor, la ubicación de los sensores térmicos es igualmente primordial. En sistemas tan grandes como los cargadores de vehículos eléctricos de CC, los sistemas de control para la monitorización en tiempo real de los niveles de temperatura pueden permitir una gestión térmica activa. Los ajustes automáticos en los mecanismos de enfriamiento basados en lecturas de temperatura pueden optimizar el rendimiento y evitar el sobrecalentamiento limitando la salida de corriente o modificando las velocidades del ventilador. Sin embargo, estos ajustes automáticos dependen de la calidad de los datos de entrada. Si los sensores de temperatura no son precisos debido a una mala ubicación, la respuesta del sistema será correspondientemente inexacta.
Factores externos y consideraciones ambientales
Las estaciones de carga de vehículos eléctricos suelen instalarse al aire libre, expuestas a diferentes condiciones ambientales. Diseñar recintos resistentes a la intemperie con ventilación adecuada y protección contra elementos como la lluvia y temperaturas extremas es crucial para mantener condiciones térmicas óptimas. Las rutas de flujo de aire y la ventilación deben diseñarse para evitar el ingreso de agua sin restringir el flujo de aire.
El factor externo más preocupante es el calentamiento solar debido al sol que incide sobre la carcasa del cargador, lo que aumenta significativamente la temperatura ambiente interna. Si bien esta es una preocupación legítima, la solución más eficaz es sencilla. Un sombreado bien diseñado con un flujo de aire adecuado entre el sombreado y la unidad de carga mantendrá la temperatura ambiente del cargador sustancialmente más baja.
