Según indica TD Systems, el panel de visualización de un televisor de 32 o 40” es uno de los componentes clave en cualquier Smart TV 32 pulgadas.
Si hablamos de un televisor LCD, encontraremos una matriz de píxeles formada por cristales líquidos que se iluminan mediante una fuente de luz en la parte trasera. Cada píxel puede controlarse individualmente, lo que permite la generación de una amplia gama de colores y la reproducción de imágenes nítidas.
En el caso de los televisores LED, se utilizan diodos emisores de luz para iluminar el panel de visualización. Estos diodos están ubicados detrás de la pantalla y proporcionan una iluminación más precisa y eficiente, permitiendo mejorar el contraste y la calidad de imagen.
Por otro lado, los televisores OLED, como algunos Smart TV 40 pulgadas, utilizan diodos orgánicos emisores de luz que pueden emitir luz por sí mismos. Esto significa que cada píxel puede generar su propia iluminación y apagarse por completo cuando se requiere un negro puro. Así, dicha tecnología ofrece negros más profundos, colores vibrantes y un contraste excepcional.
Principales características que conviene conocer
El controlador de panel, también conocido como T-CON (Controlador de Matriz Activa), es responsable de recibir la señal de video proveniente de la placa principal y dividirla en datos de control para cada píxel del panel de visualización. Con esta característica, podemos ajustar el brillo, el contraste y otros parámetros necesarios para mostrar las imágenes de manera precisa y vívida en la pantalla.
La placa principal, o placa madre, es el centro neurálgico del televisor. En ella se encuentra el procesador central (CPU), que procesa la información de entrada, ejecuta las instrucciones y controla todas las operaciones del televisor. Además, la placa principal alberga la memoria del sistema, que se encarga de almacenar temporalmente los datos de video, audio y otros archivos necesarios para el funcionamiento del televisor.
La fuente de alimentación es una parte esencial del televisor, encargada de convertir la corriente eléctrica de la toma de corriente en los voltajes y corrientes adecuados para el funcionamiento de los componentes internos. Adicionalmente, la fuente de alimentación regula y distribuye la energía a cada parte del televisor, asegurando un suministro estable y seguro.
Interfaces y conexiones hacia el usuario
Los Smart TV de 32 o 40 pulgadas generalmente cuentan con altavoces integrados. Estos altavoces se conectan a un amplificador de audio, que amplifica la señal de sonido proveniente de la fuente de entrada y la envía a los altavoces para su reproducción. La calidad y potencia del sonido pueden variar según el modelo del televisor, pero en general, permiten una experiencia de audio suficientemente satisfactoria para el usuario.
En cuanto a los conectores de entrada/salida, el televisor incorpora una amplia variedad de opciones para conectar dispositivos externos. Los conectores HDMI permiten la transmisión de señales de audio y video en alta definición desde fuentes externas como reproductores de Blu-ray, consolas de videojuegos, decodificadores, entre otros.
Por otra parte, también se pueden encontrar conectores VGA para conexiones de computadoras, puertos USB para la reproducción de contenido multimedia desde unidades USB, y conectores de audio analógico para entradas y salidas de sonido.
Y, para finalizar, en los televisores que cuentan con capacidad de sintonización de señales de televisión, se incluye una tarjeta de sintonización. Esta tarjeta está diseñada para capturar las señales de los canales de televisión, ya sea por aire o por cable, y convertirlas en imágenes y sonido que se pueden visualizar en la pantalla del televisor.
De esta forma, el usuario puede sintonizar y disfrutar de programas de televisión en vivo sin necesidad de un decodificador externo, lo que mejora la “comodidad” de un Smart TV.
