Tercera y última parte del artículo técnico escrito por Leonie Clayson, DesignSpark Community Manager, RS Components en la que nos habla de las recientes facilidades para los nuevos diseñadores.
Quizá, las FPGA constituyen el ejemplo más reciente de esto: antes vistas como un “arte oscuro” solo comprensible por ingenieros altamente cualificados con conocimientos en lenguajes de descripción de hardware, actualmente se han vuelto mucho más accesibles. Esto es evidente y beneficioso sobre todo para los diseñadores implicados en aplicaciones de visión artificial y de cálculo de aceleración.
Iniciativas como la de Intel han dado a conocer al mundo la potencia de la FPGA. Ya no hace falta ser un experimentado ingeniero de diseño de hardware para aprovechar el poder de estos dispositivos.
La tarjeta de aceleración programable de Intel (PAC, por sus siglas en inglés) es una tarjeta 1U de alto rendimiento altamente integrada que incluye una FPGA Intel Arria 10 GX, transceptores SERDES multi Gigabit y una memoria DDR de 8 GB. Una serie de bibliotecas y controladores de red neuronal de código abierto, incluido el kit de herramientas OpenVINO de Intel, complementan y simplifican aún más el proceso de desarrollo con la Intel PAC.
En lugar de limitar el diseño creativo, la actual estandarización de las FPGA lo está ampliando. Es responsable de los rápidos ciclos de innovación de una gran cantidad de nuevas aplicaciones de centros de datos y redes neuronales. En lugar de verse involucrados en largos ciclos de desarrollo de una placa FPGA personalizada, los arquitectos de sistemas y los desarrolladores de aplicaciones pueden empezar con una plataforma probada y contrastada, lo que permite ahorrar un año o más en los plazos del proyecto, así como grandes cantidades de gastos no recuperables.
Futuro para los nuevos diseñadores
Para la industria de la electrónica, la estandarización es un elemento esencial para acelerar los ciclos de desarrollo, ya que ofrece la posibilidad de sacar una mayor cantidad de productos al mercado en un determinado periodo.
No se trata de limitar el nivel de diferenciación que puede aplicar un fabricante, sino de acelerar el ciclo de diseño y que más ingenieros tengan un mayor acceso a las funciones estándar más recientes, al tiempo que se reducen los obstáculos para la entrada de nuevas tecnologías.
Como la complejidad del diseño no va a parar de aumentar en el futuro, la modularización de funciones complejas estandarizará aún más el proceso de diseño.
