Freescale Semiconductor acaba de anunciar la disponibilidad de los primeros sensores de batería inteligentes calificados AEC-Q100 del mercado industrial, que combinan tres canales de medición, una MCU de 16 / 32 bit y un módulo de protocolo CAN en un solo paquete.
Diseñados para soportar químicas de la batería tanto en aplicaciones convencionales como emergentes para aplicaciones industriales y de automoción, los sensores de batería inteligentes MM9Z1J638 miden parámetros de batería claves para monitorizar el estado de salud (SOH), el estado de la carga (SOC) y el estado de la función (SOF) para la predicción temprana del fallo.
Una arquitectura de front end de cuatro celdas flexibles soporta las baterías convencionales de ácido de plomo de 12 V, así como las aplicaciones de batería emergentes, tales como las baterías de Li-Ion de celdas apiladas de 14 V, las cajas de conexión de alta tensión y las baterías de camión de 24 V.
El fallo de la batería es una de las principales causas de averías en los vehículos, debido a errores en el sistema eléctrico. El aumento de los niveles de carga eléctrica en los vehículos pone cada vez más presión sobre las baterías, por ejemplo, los nuevos requerimientos de misión crítica tal como la funcionalidad de arranque y parada del motor cada vez más común.
Usos de los sensores de batería inteligentes
Según la firma analista Strategy Analytics, más de 52 millones de vehículos en todo el mundo van a soportar la funcionalidad de arranque y parada en el año 2020. Los requisitos de arranque y parada, junto con otros como el frenado regenerativo y el control inteligente del alternador, están impulsando una demanda de detección más precisa del estado de la batería para proporcionar advertencias tempranas de fallo y es justo aquí en donde el poseer un sistemas con sensores de batería inteligentes acelera la posibilidad de evitar errores.